Mujercitas: blusas vaporosas y cuellos bebé

¡Feliz martes! ¿Qué tal el comienzo de semana? Yo la empiezo a tope dejándote un nuevo post de period drama (que ya hacia falta) dedicado a la película Mujercitas (1994).

De todas la películas period drama que he visto ésta es mi favorita. Quizás no sea la mejor ni la más reciente pero la vi cientos de veces cuando era pequeña y le tengo mucho cariño.

Hay más versiones cinematográficas de Mujercitas, en total cinco, pero ésta es la más fiel a las novelas escritas por Louise May Alcott.

Está dirigida por Gillian Armstrong y protagonizada por Winona Ryder (Jo), Susan Sarandon (Marmee), Trini Alvarado (Meg), Claire Danes (Beth), Kirsten Dunst (Amy de niña) y Samantha Mathis (Amy adulta).

Mujercitas nos situa en plena Guerra de Secesión (guerra civil americana), alrededor de 1861 y nos cuenta como transcurre la adolescencia de las hermanas March, cuatro jóvenes afectadas por la guerra, hasta que se convierten en adultas.

No es necesario que cuente nada más de la sinopsis, sino toda la película pierde la gracia, pero una de las cosas más importantes de la historia es la austeridad con la que crecen las hermanas.

Aunque en Europa, y en concreto en Inglaterra, estamos en plena época victoriana, en Estados Unidos los March (una familia de clase media-alta venida a menos) pasa muchos apuros económicos. Con su padre en la guerra, las hermanas March tienen que trabajar para poder mantenerse, no tienen acceso a estudios superiores y deben prescindir de algunas de las costumbres sociales de la época, como por ejemplo las presentaciones en sociedad o las puestas de largo.

DISEÑO DE VESTUARIO

La película nos muestra esta situación económica a través del vestuario: los vestidos, sombreros y  accesorios pasan de una hermana a otra año tras año para ser aprovechados al máximo. Lo que un día fue un vestido de tarde de Meg, años más tarde se convierte en un vestido para casa de Amy.

El vestuario fue creado por Colleen Atwood, quién también diseño los trajes de Eduardo Manostijeras, Alicia en el País de las Maravillas, Sleepy Hollow, Memorias de geisha, etc. Con Mujercitas consiguió un Óscar al Mejor Diseño de Vestuario en 1.995.

Así como en el caso de Orgullo y Prejuicio es fácil encontrar vestidos de corte similar, en el caso de Mujercitas es muy díficil encontrar prendas actuales que nos recuerden al vestuario de la película. Estamos en pleno reinado del miriñaque, la tendencia por excelencia de la época, y las faldas son acampanadas y enoooormes. Además por ser época de guerra los vestidos son sobrios y de colores muy oscuros.

Las prendas más atractivas de esta película son el vestido rosa palo de fiesta de Meg, que es simplemente precioso, y los vestidos que aparecen en la escena de su boda.

Tanto el vestido de novia como los vestidos de damas de honor son muy delicados. Todos tienen una parte superior tipo blusa en color blanco o crudo y están hechos de telas finas y vaporosas. Los cuellos son en pico, las mangas son abullonadas y tienen bordados tanto en el ribete de los hombros como en el del cuello.

Hay blusas actuales similares a la parte superior de estos vestidos y perfectamente combinables con vaqueros o pantalones de vestir.

Durante la película también aparecen blusas y vestidos abotonados por detrás y con cuellos bebé troquelados. En Miss Patina hay diseños parecidos al vestido estampado que lleva Meg pero con motivos y colores actuales.

Si no te gustan los estampados siempre puedes optar por diseños en blanco como este de Larmoni.

¿A alguien le gusta esta película tanto como a mí?

Alba Vilalta

Soy Alba Vilalta, experta en Influencer Marketing y una friki de la Historia de la Moda y los Period Dramas. Desde 2013 comparto en este baúl virtual mi visión personal de la moda, además de escribir sobre mi principales intereses: cosmética, literatura y viajes.

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