¡¡¡¡Feliiiiiz jueves!!!
Antes de comenzar con el post de hoy quiero dar las gracias a todos los lectores que me hayáis votado para los premios Bitácoras 2016! Finalmente he quedado en el puesto 58, casi treinta puestos más arriba que el año pasado y estoy súper contenta! Muchas gracias por pasaros por el blog cada semana y haberme votado un año más 🙂
Me encantaría saber quién ha votado, por que la verdad no tengo ni idea jajaja Podéis manifestaros en los comentarios o enviarme un mail a lectores@elbauldeedenia.com 😉 ¡Muchísimas gracias una vez más!
Y ahora sí que ya entro en materia. Si me seguís por Twitter seguramente visteis que la semana pasada tuve unos días de descanso y aproveché para hacer excursiones cercanas a casa…Uno de esos días fui a Sitges a pasar el dia y la verdad es que no estuvo nada mal.
Por si no lo conocéis, Sitges es un pueblo de costa y está a una media hora de Barcelona. A comienzos del siglo XX se hizo muy popular entre los artistas gracias a la figura de Santiago Rusiñol, que tenía su taller en Sitges. Actualmente es conocido por albergar el Festival Internacional de Cine Fantástico de Cataluña.
Octubre-Noviembre es buena época para visitar Sitges, a pesar de ser un pueblo de costa hay bastante ambiente y no te encuentras con el agobio típico del verano.
Comenzamos la mañana visitando el Cau Ferrat, el museo-taller del pintor Santiago Rusiñol y cumbre de las llamadas Fiestas Modernistas. Al salir dimos un paseo por el casco antiguo de Sitges y por el paseo de la playa.
Para comer no tuvimos demasiadas opciones, pues justamente fuimos el día de descanso de la mayoría de los restaurantes. Finalmente decidimos entrar en el 33 Sitges, situado en la Calle Mayor.
La verdad es que me es difícil hacer una valoración 100% positiva. El local es bonito, moderno y limpio, la atención buena y la rapidez para sacar los platos también buena. Hasta ahí todo correcto.
El menú de mediodía cuesta 12,95€, precio que a priori encuentro correcto, pero que empezó a parecerme caro cuando me di cuenta de que no incluía los postres ni la bebida (ni si quiera agua). Personalmente que haya o no haya postre me da un poco igual porque habitualmente no tomo, pero que no estuviera incluida ni el agua me pareció un poco abusivo.
Buena materia prima y platos bien presentados, pero que creo que pueden resultar escasos si eres de buen comer.
Nosotros pedimos carpaccio de lubina y ensalada con roquefort y vinagreta de mostaza y miel de primero.
El carpaccio de lubina estaba muy rico pero se me hizo escaso, hubiera comido un poco más la verdad…
La ensalada también estaba buena y la mezcla de sabores muy interesante.
De segundo tomamos dorada con verduras y entraña con chimichurri y patatas.
Los segundos también estaban buenos, pero lo hubieran estado más si hubieran estado menos hechos. En algunas zonas estaba algo quemado y mataba el sabor del resto del plato.
Alomejor los pillamos en un mal día, no lo sé, pero esperaba más para un restaurante que está en el puesto número 9 de Tripadvisor. No lo recomiendo, por lo menos no para tomar el menú de mediodía.
¿Y tú, has ido alguna vez a Sitges? ¿Qué es lo que más te gustó?
Soy Alba Vilalta, experta en Influencer Marketing y una friki de la Historia de la Moda y los Period Dramas. Desde 2013 comparto en este baúl virtual mi visión personal de la moda, además de escribir sobre mi principales intereses: cosmética, literatura y viajes.
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